…vio Dios cuanto había hecho, y todo estaba muy bien. El séptimo día dio por concluida la labor que había hecho”
Con el trabajo de nuestras manos y el corazón en quien hace que todo sea bueno, queremos asemejarnos al Señor, que desde el inicio de la creación nos enseña -con su ejemplo- a contribuir, desde la sencillez, para que todo esté bien.
Así podemos llevar a buen término el encargo recibido: nos confía la creación, que no está terminada, para que con nuestro esfuerzo colaboremos a que esta llegue a plenitud.
Cada pasta, cada pequeña obra de artesanía, cada pincelada… lleva un Ave María por ti. Y, a través de nosotras, queremos que el Señor siga obrando esas maravillas que solo Él es capaz de hacer moldeando un poco de barro con Sus manos.
Mostrando 17–32 de 49 resultados